La noche de Reyes es especial, tiene mucha magia, recuerdos de cuando eramos chicos y poníamos zapatitos, pasto y agua para su llegada , imaginando como harían para entrar al jardín, con camellos (me los imaginaba como si tuvieran la propiedad de elevarse para atravesar el portón); esas noches calurosas en las que por alguna razón me despertaba (seguramente por la ansiedad de lo que estaba por ocurrir al día siguiente) en las que sólo pensaba, los escuchare??.
Y mis padres con dedicación y seguramente mucha alegría de saber lo que en nosotros provocaban, desparramaban nuestras "ofrendas", y nos dejaban esos enormes paquetes de regalos, porque eran siempre los más importantes del año!!!
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Rubens – La Adoración de los Magos, 1609 |
Dejo las postales con las que soñaba de chica, que mamá atesoraba en unas cajas que sacaba para las fiestas y una obra de Rubens.
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